EL «GUERNICA» EN ESPAÑA

"Guernica" de Pablo Picasso

EL «GUERNICA» EN ESPAÑA

Fecha de emisión: 25 octubre 1981

Valor facial: 200 pesetas

Dentado: 13 ¼ x12 ¾

Impresión: Huecograbado

Tirada: 5.000.000

Hojita de 163,6 x 105,6 mm.

De Picasso, nuestro genial compatriota, hay un sello de 1978 y de 1981. Hoy vamos a referirnos a su obra «Guernica», motivo que se emite en 1981 con ocasión de la llegada a España del famoso cuadro. Guernica es el nombre de una población situada a 30 Km. de Bilbao, que constituye el símbolo de las libertades vascas. Ante su famoso roble se reunía el parlamento y cerca de él se juraban los fueros. El 26 de abril de 1937, con la pequeña población repleta de refugiados y soldados en retirada, los Heinkel y Junkers de la alemana «Legión Cóndor» bombardearon la villa y ametrallaron a sus habitantes durante tres horas. La población quedó parcialmente destruida y murieron centenares de personas.

El incendio y la «masacre» de la población vasca obraron para que el gobierno de la República encargara a Picasso, que pese a vivir en París, era director honorario del Museo del Prado, la realización de una obra que constituyera un reflejo gráfico de la tragedia. El pintor llevó a cabo el encargo y cobró su importe, de cuyo pago existe documentación fehaciente, que ha sido uno de los más importantes argumentos para la vuelta a España de la importante obra.

Es ésta un enorme cuadro de 7'5 x 3'5 metros, en el que el autor se erige en intérprete del horror que supuso el bombardeo. Sobre el blanco y el negro sólo existe una gama infinita de grises; la ausencia de otros colores consigue un intenso dramatismo y compone un poema doloroso, una elegía que pretende describir el horror del suceso. Un toro, que parece representar a España; una madre que llora con el cuerpo inerte de su hijo en brazos, un guerrero destrozado cuyo brazo conserva un trozo de espada, deformadas figuras, rostros contraídos, trozos de miembros, rodean la figura central de un caballo, desorbitado y retorcido, con un mudo relincho de dolor.

El cuadro se hallaba en el Museo de Arte Contemporáneo de Nueva York, y fue voluntad expresa del pintor que volviera a España cuando hubiera en el país un sistema democrático. El gobierno español ha realizado laboriosas y dilatadas gestiones, que dieron fruto finalmente en 1981. El cuadro fue trasladado con excepcionales precauciones y expuesto, junto a 63 dibujos y óleos previos, en el Casón del Buen Retiro, de Madrid, a partir del 24 de octubre de 1981, en una instalación especial diseñada para la salvaguarda de una obra que es la más famosa y la que mejor representa la tragedia que supuso la guerra civil española.