Tiro con arco |
Minipliego. Tirada 325.000 |
Vela |
Minipliego. Tirada 325.000 |
Voleibol |
Minipliego. Tirada 325.000 |
Matasellos
del Primer Día de Circulación |
PRE - OLÍMPICA BARCELONA' 92 (serie VIII)
Fecha de emisión: 6 marzo 1992
Valor facial: 15+5 pesetas, 25+5 pesetas y 55+5 pesetas
Dentado: 13 ¾ x14
Impresión: Offset
Tirada: 1.962.367
Pliegos: 12
Las emisiones de sellos previas a la Olimpiada de Barcelona han Ido enumerando, por orden alfabético, los distintos deportes que intervendrán en ella. La octava de tales emisiones, la presente, comprende los tres últimos deportes que son, sucesivamente, y ateniéndose al orden citado, el tiro con arco, la vela y el voleibol.
Las competiciones de TIRO CON ARCO se efectúan disparando flechas sobre una diana. El arco y las flechas datan del paleolítico superior, e inicialmente fueron un útil de caza para procurarse el sustento; después, un arma de guerra que se convirtió más tarde en un pasatiempo y en un deporte finalmente. Las normas actuales de competición las establece y regula la FITA, (Federación Internacional de Tiro con Arco). Existen varias distancias, desde 30 a 90 metros; y dos dianas diferentes según la distancia desde la que se dispare. La aproximación al punto central del blanco decide, como cabe esperar, la mayor puntuación. Es este un deporte cuyos resultados han mejorado en los últimos años a causa de las innovaciones experimentadas en la construcción de los arcos y las flechas y de los materiales con los que se confeccionan.
La vela, con el auxilio del viento, ha impulsado la navegación desde tiempo inmemorial. Y no ha dejado de utilizarse todavía en muchos lugares del mundo, pese a los adelantos experimentados en la navegación. Las REGATAS A VELA son olímpicas desde 1896, y consisten en una actividad deportiva difícil y compleja, pues a los vientos y rumbos se une el estado de la mar, que presenta con frecuencia condiciones adversas. Las regatas se disputan en una extensión marítima denominada "campo de regatas" que tiene forma triangular, delimitada por tres balizas; y se regulan mediante un complicado reglamento y un código de señales efectuadas con gallardetes y banderas.
Si los dos deportes anteriores constituyen la transformación de una antigua actividad humana, el VOLEIBOL es un juego de reciente creación: lo ideó el profesor William G. Morgan, en Massachusetts el año 1895. Lo practican dos equipos de seis jugadores que luchan con la finalidad de que el balón toque el pavimento donde se coloca el equipo contrario, impulsándolo con las manos por encima de una red. El voleibol se ha extendido por todo el mundo, y es olímpico desde que en 1964 se celebraron las Olimpiadas en Tokio.
Ha diseñado los sellos el pintor Xano Armenter, nacido en 1956 en Las Palmas de Gran Canaria.
Desde 1986 a 1991 se han ido sucediendo, cada mes de octubre, unas emisiones de sellos con idéntico motivo: el de la inminencia del V Centenario del Descubrimiento de América. En las seis emisiones se ha recogido la efigie de diversos personajes relacionados con el Descubrimiento y la posterior colonización y otras circunstancias referidas al nuevo continente.
La emisión de 1992 sale a la luz en marzo, pocos meses antes de la conmemoración. Sorprendentemente, la ilustración no supone en esta ocasión, un gran esfuerzo creativo: los tres sellos son iguales, pues solo varía el color y se limitan a reproducir otro aparecido en 1930, que con treinta y cuatro más formaba parte de un magnífico conjunto destinado a conmemorar la gesta colombina. Aquel sello, donde figuraban la nao Santa María y las carabelas La Pinta y La Niña, es el mismo que se emite en 1992, formando parte de una hojita bloque con tres valores, a los que se une una viñeta central que muestra la parte superior del monumento erigido en Barcelona a la memoria de Colón.
El descubrimiento de América es uno de los momentos culminantes del acontecer humano. Poco imaginaban Colón y sus hombres que iban a conquistar un brillantísimo lugar en la historia al acometer lo que a Juan II de Portugal, que estudió el proyecto antes de que lo hicieran los Reyes Católicos, debió parecer una descabellada empresa. Y entre todos ios que participaron y contribuyeron a ella destaca la figura de Colón, cuyo origen, parte de su vida y los datos en que basó su idea de viajar hacia Occidente siguen siendo un enigma. Pero es evidente que fue uno de los mejores navegantes de su época, pues cruzó varias veces un océano inexplorado y se movió con soltura en los bajíos y arrecifes de las islas que recorrió en sus navegaciones americanas.
Colón es el símbolo del hombre renacentista que emerge de un mundo regido por tradiciones y mitos para ir en busca de nuevas experiencias. Y asimismo, un inspirado precursor, un hombre práctico y místico a la vez, pues si de forma indiscutible demuestra sus conocimientos y su tesón al mantener firmemente sus ideas, por otra parte busca con ahinco el Paraíso terrenal, cuyas puertas cree encontrar en la desembocadura del Orinoco; y anota en su diario, al describrir las islas que recorre, unas apasionadas endechas al Trópico.
El Descubrimiento es el gran cambio de la Historia. Si América se transformó radicalmente al impacto de una nueva cultura, Europa experimentaría una revolución económica con la llegada a ella de metales preciosos, junto a profundos cambios políticos tendentes a establecer un nuevo equilibrio en el orden mundial.
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