EUROPA - FIESTAS POPULARES 1998

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Fogueres de San Joan (Hogueras de San Juan), Alicante

Matasellos del Primer Día de Circulación

EUROPA - FIESTAS POPULARES 1998

Fecha de emisión: 5 de mayo de 1998

Valor: 70 pesetas (Multicolor)

Tirada: 5.000.000

Papel: Estucado, engomado, fosforescente

Estampación: Huecograbado

Tamaño del sello: 28,8 x 40,9 mm. (vertical)

Dentado: 13 3/4

Pliegos: 50 efectos

La serie Europa conmemora este año Las Fogueras de Sant Joan (Hogueras de San Juan), declaradas Fiestas de Interés Turístico internacional. Son las fiestas más representativas de la ciudad de Alicante y tienen lugar durante el solsticio de verano, el 24 de junio.

Desde tiempo inmemorial, la ciudad de Alicante celebra la llegada del verano con verbenas populares que finalizan con el encendido de hogueras. A partir del año 1928 la fiesta se hizo oficial y su definición es foc, flama, fum, res" (fuego, llama, humo, nada). En su origen se quemaba la madera inservible y con el paso del tiempo se comenzaron a realizar verdaderas obras artísticas, en madera y cartón, que reproducen motivos alusivos a personas o sucesos de la vida local. Cada barrio nombra su comisión organizadora y los artistas-constructores presentan sus bocetos para participar en el disputado concurso.

La fiesta se inicia con el pregón y finaliza con la quema de un gran castillo de fuegos artificiales. Durante esos días tienen lugar la "plantá" de las distintas hogueras y la instalación de la "barraca", recinto acotado en plena calle en cuyo interior se desarrollan las verbenas y se degustan platos de la gastronomía alicantina. Desde 1932 se elige anualmente a la "bellesa del foc" (belleza del fuego) que, con su corte, simboliza a la mujer alicantina.

Durante los días de fiesta se celebran desfiles y tracas, que culminan en la famosa "nit de Sant Joan" con el disparo, a las 12 de la noche, de la majestuosa "Palmera" desde el monte Benacantil, uno de los espectáculos pirotécnicos más bellos que existen. A partir de ese momento arderán todos los artísticos monumentos que durante días han poblado las calles. Junto al fuego, el agua de las mangueras de los bomberos o "banyá" constituye un emotivo colofón a las fiestas alicantinas.